Hemos utilizado diferentes fotografías para ver la creación de esta playa. Inicialmente, cuando todavía no se había realizado ninguna transformación en el territorio, existía una acumulación de arena entre la punta Negra y la punta del Mig. Es de suponer que en la curvatura que realiza actualmente la carretera en la zona de Los Olivos también existiese una pequeña cala con acumulación de arena.  Pero, eso es otra historia.

En la imagen de cabecera se puede ver como se configura la playa de l’illa debido al istmo que une a la isla con el cabo. Se puede ver los primeros edificios en el istmo y en el margen de la playa. Todavía se puede apreciar levemente la punta del Mig transformada por la carretera y donde se ubica un merendero llamado Los Olivos.

Aquí vemos la playa de l’Illa donde actualmente se encuentra el Hostal-Restaurante El Chalet. Se observa como la playa tiene una ligera acumulación de arena que crece y se reduce en función del oleaje. Se puede observar la presencia de la montaña sin las carreteras realizadas en los años 70 del siglo XX para transformar esa parte del territorio.

Curiosa postal donde se ve a un guardia civil vigilando el entorno de la playa.  Otro de los aspectos a destacar es la acumulación de arena superior en la zona del Coloso a la que podemos encontrar en la zona del edificio Bahía Ello es debido a la entrada del oleaje y la acumulación de arenas así como el entorno más escarpado entre la punta Negra y la punta del Mig.

Aquí se produce una transformación importante con la construcción del espigón de  la Punta Negra. Uno de los cambios que se aprecian es la fuerte acumulación de arena que se produce en ese entorno mientras aparece un retroceso en la zona del Coloso.  La construcción del espigón y su posterior abandono provoca un cambio radical en la playa así como en las zonas colindantes del cap Blanc.

En esta imagen se puede ver la eliminación del espigón de punta Negra y los cambios que se aprecian en la playa. De forma gradual se pierde arena en la zona de Punta Negra tanto en los dos lados del espigón, circunstancia que permite una circulación del oleaje tanto hacia el Cap Blanc como a la zona del Racó.